|
Glossa
| BARROCA | CORAL | RELIGIOSA (2 CD)
Johann Sebastian Bach
Misa en Si menor
REF.: GCD 921112
EAN 13: 8424562211124
Si realiza el pedido hoy, este producto estará listo para ser enviado el lunes 18/01/2021
Veinte años después de la gira que la Orquesta del Siglo XVIII llevase a cabo con la Misa en si menor, una nueva tournée ha sido la ocasión para presentarla con renovada frescura. Un extraordinario quinteto de solistas y las voces de Cappella Amsterdam reflejan, acompañados de Brüggen y su conjunto, la honda y experimentada visión que el director tiene de la obra maestra de Bach. Estamos antes una nueva grabación que se antoja conmovedor documento sonoro de la intensa dedicación del director flamenco a la proyección de la obra del inmortal padre de la fuga.
FECHA DE PUBLICACIÓN
09/03/2010
INTÉRPRETES
Dorothee Mields, soprano I Johannette Zomer, soprano II Patrick van Goethem, alto Jan Kobow, tenor Peter Kooij, bajo
Cappella Amsterdam Orchestra of the Eighteenth Century Frans Brüggen, director
CONTENIDO
Johann Sebastian Bach (1685-1750):
Misa en Si menor (BWV 232)
CD 1
I. Misa (Kyrie, Gloria)
CD 2
II. Symbolum Nicenum (Credo) III. Sanctus IV. Osanna, Benedictus, Agnus Dei et Dona Nobis Pacem
2 CD - DDD - 54'50''+51'31''
RESEÑA (La Quinta de Mahler)
Auch das Unglück hat ein Gutes. Así leído, parece el título de una cantata. Pero no, no es ninguna cantata (al menos que yo conozca). Es como dicen en alemán “no hay mal que por bien no venga”. Como lo decimos nosotros. También decimos que un gran mal genera un gran bien o que una puerta que se cierra abre otra. Cuento esto porque andaba yo pensando que si elaborásemos una lista de personajes antipáticos y condenados de la Historia de la Música, individuos que no han hecho sino zancadillear a los grandes músicos en su labor creadora, pienso que el burgomaestre Jakob Born (como el profesor Ernesti o el Arzobispo Colloredo de Salzburgo), andaría situado en lo más alto. Verán: el tal Born era el alcalde de Leipzig en 1730 y una de sus líneas de acción fue promover que Bach se centrase más en sus clases y no tanto en componer. Esta postura, aunque perdedora felizmente, vino a colmar el vaso de los desagravios sufridos desde hacía años por parte de sus superiores (entre otros por el citado profesor Ernesti). Pues bien, tan enojosa situación laboral fue la causa de que el genial Kantor terminase solicitando en 1733 protección artística al Elector de Sajonia Federico Augusto II (nombrado ese año Rey de Polonia), ofreciéndole sus servicios como compositor de corte y presentándole, para su consideración, el Kyrie y el Gloria de la que hoy conocemos como Misa en si menor. Debemos preguntarnos cómo agradecer al infeliz Bürgermesiter Born los milagrosos efectos de su ignorancia musical y palmaria falta de visión. Una deuda impagable tendremos para siempre con este sombrío personaje que empujó a Bach a opositar a la corte de Dresde con la mayor humildad, pero con su mejor obra. Lo que resulta ya imposible de evaluar es lo que hubiésemos ganado, o perdido, si la Guerra de Sucesión polaca no hubiese propiciado que la solicitud de Bach quedase finalmente reducida a un título honorífico años después. Sea como fuere, Bach, tomando de aquí y allá materiales previos, decidió completar posteriormente, y ya sin propósito de promoción alguno, la Misa en su forma católica (esto es, con su Credo, su Sanctus y su Agnus Dei), regalando a los mortales de todo tiempo y lugar un monumento ciclópeo sin parangón. Glossa nos propone aquí su enésima traducción, de manos de una leyenda viva: Frans Brüggen, al frente de su orquesta habitual y la Capella Amsterdam, tal y como fue interpretada en una larga gira europea a principios de 2009. El director holandés siempre ha buscado el vigor en la solidez de las líneas más que en la electricidad de los tempi. Nada es ligero con Brüggen porque todo tiene su peso justo. El oyente sentirá estar en la orilla de un río caudaloso, sin remolinos ni caídas vertiginosas, y siempre fluyendo al ritmo adecuado. Respecto a la galería de solistas, destacaría la veterana presencia del bajo Peter Kooy (muy seguro en sus dos arias) y la soprano Johannette Zomer, que canta un extraordinario Laudamus te. De no menor responsabilidad en esta partitura debemos considerar a los primeros atriles de la orquesta (la Misa en si es una auténtica colección de solos instrumentales), y en este sentido, justo es aplaudir la labor del concertino Rémy Baudet en el aria antes citada, así como al flautista Michael Schmidt-Casdorff en el delicioso Benedictus, un frágil oasis flanqueado por el explosivo Osanna a ocho voces. Una interpretación, en resumen, llena de emoción, grabada en Varsovia diez años después de que el propio Brüggen y su orquesta viviesen en esa misma ciudad una experiencia inolvidable con esta Misa. Obra inagotable, y milagrosa, nacida –curiosamente- como respuesta al acoso de la más obtusa burocracia municipal. Por todo ello, por lo que a mí respecta, Herr Born, está usted más que perdonado.
Caronte
Supraphon
Antonio Vivaldi; J. S. Bach
Las cuatro estaciones; Concierto para dos...
|
IBS Classical
Sculptures
Obras para saxo y piano
|
Hänssler Classic
Johann Sebastian Bach
Sonatas y partitas para violín solo
|
Carus
Heinrich Schütz
Los Salmos de David (col. Schütz, vol. 8)
|
Glossa
Wolfgang Amadeus Mozart
Requiem
|
Glossa
Jean-Philippe Rameau
Suites orquestales
|
Glossa
Las bodas de Inglaterra y...
Catedral de Winchester, 1554
|
Glossa
L’Arte del Violino in...
Obras de cámara para violín de Berardi, Merula,...
|
Glossa
Francisco de Peñalosa
Missa Nunca fue pena mayor
|
|
LA QUINTA DE MAHLER
Teléfono
91 805 3899
Correo electrónico
tienda@ laquintademahler.com
Nuevo local
Galileo 46
28015 Madrid
Horario
De lunes a viernes: 11:00-14:00
17:00-20:00
Sábados:
11:00-14:00
|